Las mujeres tienen más dificultad en dejar de fumar

A esta conclusión llegaron un grupo de expertos investigadores de la Universidad de Montreal, después de haber realizado un estudio dirigido por la Dra. Jennifer O’Loughlin.

El estudio fue realizado con la participación de 620 adolescentes fumadores.

Entre los nuevos fumadores adolescentes, los de sexo masculino eran más propensos a dejar de fumar que las de sexo femenino y ambos se sintieron intimidados con las etiquetas de advertencia en los paquetes de cigarrillos.

«En la actualidad, son pocos los estudios longitudinales a identificar los factores que favorecen o dificultan los jóvenes fumadores a dejar de fumar», dijo Jennifer O’Loughlin, Ph.D., profesora en el Departamento de Medicina Social y Preventiva de la la Universidad de Montreal, en Quebec, Canadá.

Ella afirma que “En nuestro estudio, hemos aprendido que el sexo masculino, la edad avanzada, advertencias en los paquetes de cigarrillos, y la participación en deportes de equipo contribuyeron con la interrupción del vicio, mientras que el estrés familiar, la preocupación por el peso, el consumo de drogas y el sobrepeso son un obstáculo para dejar de fumar».

De los estudiantes que participaron en el estudio y que fumaban al menos ocasionalmente, los varones eran 80 por ciento más propensos a de dejar de fumar que las hembras y los adolescentes de más edad tenían un 30 por ciento más de probabilidades de dejar de fumar que los adolescentes más jóvenes. Entre los participantes que vieron advertencias en los paquetes de cigarrillos hay quien los motivaba a dejar el vicio, pero no a todos, y los que participaron en deportes en equipo tuvieron un 44 por ciento más de probabilidades a dejar de fumar.

«En general, estos resultados apoyan que los hábitos saludables de la familia, que incluyen no fumar como la norma, así como el intercambio positivo y funcionamiento, ayudará a los fumadores noveles descontinuar el tabaquismo «, dijo O’Loughlin. «Los padres que fuman deben comprender los efectos de su consumo de tabaco en sus hijos, y las familias deben trabajar juntas o con los profesionales para identificar y reducir las fuentes de estrés familiar. Los padres deben involucrar a sus hijos en los deportes y otras actividades saludables. «Es imperativo que entendamos mejor los factores que promueven la interrupción de fumar en las mujeres en comparación con los varones, para que podamos diseñar intervenciones específicas de género», agregó. O’Loughlin.

Aunque no fueron identificados los motivos clínicos para que ellas tengan más dificultad que ellos a dejar de fumar, lo que si queda claro es ese mismo hecho y que tenemos que apuntar baterías en ese sentido para darle la vuelta a esta situación con la intención clara de ayudar a nuestros adolescentes a dejar de fumar así como también, en la medida de los posible, lograr que nunca inicien con el vicio.

Fuente: Cancer Epidemiology, Biomarkers & Prevention

http://cebp.aacrjournals.org/content/23/6/1090.abstract